EL TRIUNFO DE TOKIO
La Hora
10 de septiembre de 2013
Todos seguimos con interés el desenlace de la presentación de candidaturas de las tres ciudades finalistas para ser sede de las Olimpíadas para el 2020. Más aún, quienes tuvimos la fortuna de acompañar a muchos españoles, miles de ellos, en una espontánea manifestación que junto a la simbólica Puerta de Alcalá de Madrid, se realizó el pasado sábado 7 de septiembre, cuando los globos rojos en manos de niños y de adultos, servían de manera de expresión para vivar y alentar a un Comité Olímpico Nacional Español, en la difícil tarea de lograr un triunfo, luego de dos derrotas consecutivas.
Desde un comienzo se vislumbró una gran distancia entre la votación obtenida por Japón, frente a las propuestas de Turquía y España, así es que esta vez la justa fue entre Tokio, Estambul y Madrid.
Todos sentimos que un triunfo madrileño, le habría significado mucho a la vapuleada autoestima española, y que la ganancia de Estambul le habría valido una especie de espaldarazo al gobierno turco.
Pero quienes se alzaron con el triunfo fueron los disciplinados japoneses, quienes resaltaron por su política antidopaje, ninguno de sus deportistas ha dado positivo en las pruebas realizadas, mientras los escándalos han estado tras la puerta de la delegación española. Tokio demostró también que tiene la fortaleza económica para enfrentar las inversiones que deben realizarse para aprontar todos los espacios deportivos y turísticos que el evento conlleva.
Así es que será Tokio 2020; también para el Japón el triunfo representa la capacidad de este pueblo de superar sus adversidades, casi de despertar como una especie de ave Fénix, de entre sus cenizas, las que dejó el devastador tsunami y luego la consiguiente fuga atómica.
Se demuestra una vez más que inclusive de las desventuras se pueden obtener fortalezas para salir adelante.
Tokio 2020 será sin duda inolvidable, hay toda una nación de grandes fortalezas, detrás de ello.
ROSALÍA ARTEAGA SERRANO.