Insisto en sostener que la profesión de los maestros debe jerarquizarse, debe ser considerada como la más importante dentro de la escala social, por el aporte  que ellos hacen a las generaciones que se forman: niños y adultos.

 

Por ello, me permito, a través de la generosidad de esta columna, hacer un llamado a los maestros y maestras, para que, una vez más, demuestren su valía, sus capacidades, su creatividad, su entusiasmo, participando en la convocatoria que hace la Fundación FIDAL  para el VII concurso nacional y II internacional de excelencia educativa.

 

Es un concurso que brinda la oportunidad a los maestros de educación inicial, básica, media o bachillerato, pero también de las academias e inclusive a los profesores jubilados, para que demuestren esa valía en la que muchos tenemos fe, que sirve para formar a niños y jóvenes pero también para crear esperanzas en un país y en un mundo mejor.

 

Los maestros jubilados tienen también la posibilidad de escribir su autobiografía, lo que permitirá que muchos nos beneficiemos de sus experiencias, de las anécdotas que se animen a relatar, de los consejos que seguramente tendrán para ofrecer.

 

Esta séptima convocatoria, no hace sino reafirmar el entusiasmo que anima a quienes hacemos la Fundación FIDAL por el tema de la educación, lo que convierte a esta tarea en un compromiso de por vida para con esta tarea y esta responsabilidad.

 

Lo que hay que vencer y superar para presentarse a un concurso de esta naturaleza, es la frecuente timidez y minusvaloración que afecta a los profesores respecto de su propio trabajo. Por ello es necesario recuperar la auto estima, la confianza necesaria para reconocer que lo que se hace es importante.

 

Los estímulos son necesarios. Se debe considerar que frecuentemente se apela a las sanciones y a los castigos cuando probablemente rindan mejor efecto los premios y las recompensas.

 

Faltan pocos días para que se cierre el concurso. La fecha límite es el diez de diciembre, las bases del concurso y la guía de presentación están en la web www.fidal-amlat.org  

 

 

 

ROSALÍA ARTEAGA SERRANO.