Hay signos de que los tiempos están cambiando, me refiero en este caso a la composición religiosa y social en los diferentes países, sobre todo Europeos, lo que no sería nada que llame la atención, si es que no percibiéramos también un sentido de beligerancia muy fuerte, que ha dado origen a execrables hechos de violencia y de muerte en lugares como París y preocupación por lo que puede ocurrir en otros países y ciudades en los que se teme pueda haber manifestaciones de lo que se ha llamado el nuevo Yihadismo, que tiene expresiones violentas que vuelven muy vulnerables a las sociedades.

 

El Yihadismo, en el que predominan las acciones suicidas, no es peculiaridad de países de occidente, la mayor parte de estos ataques, acompañados de secuestros masivos, de masacres, se dan en los propios países en donde hay una mayoría musulmana, que muchas veces siente los efectos de una polarización que deja de lado la posibilidad de diálogo y de entendimiento.

 

Hace poco, caminando por Hyde Park, en el corazón de Londres, pude contemplar una importante manifestación de personas que hacían una "Marcha de invierno", en la que entregaban camisetas y otros elementos, insistiendo en que la famosa y polémica Franja de Gaza, que ahora es parte del territorio del Estado de Israel, pase a una administración musulmana.

 

Una de las cosas que particularmente me sorprendió y preocupó, fue el ver la cantidad de mujeres, la mayor parte de ellas con velos, y también de niños, a quienes, además de entregarles la camiseta, les daban también una especie de mano gigante de material plástico, con inscripciones alusivas al tema, pero además con un dedo índice apuntador, que fácilmente era transformado por los niños en una especie de arma de juguete con la que se apuntaban unos a otros.

 

Particularmente pienso que este tipo de situaciones estimulan la violencia y el uso de armas en los más pequeños, que no propicia el diálogo interreligioso en el que debemos todos empeñarnos si queremos procurar la tan frágil y amenazada paz mundial.

 

Hay quienes creen que la tercera guerra mundial ha comenzado, con todos los ataques de ISIS y de otros grupos terroristas, la mayor parte de ellos vinculados al Islam, si es así, el corazón de las capitales europeas, con situaciones como las descritas, bien pueden ser puntos neurálgicos a tener en cuenta.